Rusia ha potenciado su presencia militar en Siria con el envío de un nuevo lote de misiles superficie-aire.
Según ha informado este viernes la cadena de televisión estadounidense Fox News, un barco con un nuevo cargamento de misiles SA-21 llegó el jueves al puerto de Tartus, en el oeste de Siria.
Un
funcionario estadounidense, citado de manera anónima, afirmó que los
satélites han captado que decenas de misiles SA-21 para los avanzados
sistemas de defensa aérea S-400, junto a varias lanzaderas, han sido
descargados en la base naval rusa.
De acuerdo con Fox News, con
este lote de SA-21 se “duplica” el número de los misiles antiaéreos que
Moscú ha desplegado en Siria. Por el momento, los Gobiernos de Rusia o
Siria no se han pronunciado al respecto.
Esto ocurre dos días
después de que la misma cadena estadounidense informara del envío de 21
obuses de artillería M-30 al Ejército sirio. Además, fuentes
norteamericanas, basándose en fotos satelitales, informaron el domingo
del despliegue de al menos un sistema de alerta temprana y control
aerotransportado (AEW&C) de Rusia en la base aérea de Latakia, en el
oeste de Siria.
Estos informes vienen después de que el 6 de mayo entrara en vigor un acuerdo entre Damasco y la oposición armada para reducir la violencia en cuatro zonas del país,
incluidas la provincia de Idlib (noroeste), sectores de las vecinas
Latakia, Alepo y Hama, parte del norte de la provincia de Homs, Guta
Oriental (sita en los alrededores de la capital, Damasco) y ciertas
áreas en el sur del país; un pacto impulsado por Moscú.
Rusia tiene desplegadas unidades de misiles S-400 y S-300 en sus bases aéreas en Siria para defender, según Moscú sus equipamientos militares.
En
febrero, el vicepresidente del Consejo de la Federación de la Asamblea
Federal de Rusia (Cámara alta del Parlamento), Ilyas Umajanov, dejó
claro que el apoyo ruso a la lucha antiterrorista del presidente sirio, Bashar al-Asad, podría incluir el envío de equipamientos militares de “alta precisión”.
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